Crítica escrita por la Arq. Minerlava Alexis Cabana Ñaño.
“Tienes que hacer algo por la comunidad para merecer existir”. A partir de la revolución Industrial, la oportunidad de crear, diseñar y dar respuesta a una necesidad ha sido más simple y rápida; sin embargo, el tiempo y la necesidad de obtener un beneficio, nos han podido reflejar que la mayoría de productos industriales no son consecuentes con sus detalles y la idea de mejorar la calidad de vida de las personas se encuentra en un segundo plano, obteniendo un diseño elitista y menos humano. Entender la forma en que cada cultura vive, es importante y más aún comprender el estilo de vida de una persona con una economía promedio que vive en una sociedad, porque mediante el proceso de diseño, se debería dar opción a la igualdad, a la oportunidad de adaptación y acceso libre para todos.
Creemos aún en un mundo, donde la gente tenga la opción de adquirir cualquier objeto para su permanencia de manera rápida y sencilla, que sea capaz de exponer un concepto claro y pertinente, un diseño que no es parte del egoísmo que se ha creado en una sociedad moderna, sino que va en la búsqueda de una identidad propia e intenta humanizar el trazo en el papel, para dar por resultado un objeto, útil, sencillo y honesto. El diseño democrático pronunciado por uno de los diseñadores industriales más influyente de los últimos años, Philippe Starck, nos hace comprender que existen otras opciones modestas y generosas al diseñar un producto para la comunidad, a partir del diseño de una silla hasta el diseño de audífonos Parrot Zik que más que pretender encajar en un estilo modernista, denota su simplicidad.
Oportunamente, al analizar su trabajo como diseñador, pude comprender una nueva perspectiva y vocación hacia el diseño y tal como el señala mediante su acento parasino y humildad: “Mi razón de existir fue servir, sirviendo a mi comunidad y ayudando a mi comunidad”. El trabajo que desarrolla Starck rompe cualquier esquema que se ha formado dentro de la burbuja de cristal de clases sociales, porque sus diseños no están concentrados en el producto sino en el resultado y el impacto que tendrá el producto en la vida de la persona que lo usará. Admiro la singularidad que tiene Philippe Starck, al mencionar su visión en cuanto al diseño, porque su metodología se sustenta en diseñar objetos útiles, honestos y accesible para todos, lo cual permite visionar el diseño de una manera horizontal.
Actualmente convivimos en una sociedad subdivididas por clases sociales y es difícil generar una ruptura de ideología, porque cada persona tiene la libertad y la oportunidad a la elección, pero será factible ¿Aplicar el diseño democrático en la producción de objetos industriales y quizás en la arquitectura?, y ¿Por qué?, son dos cuestiones importantes que nos conllevan a una respuesta simple: Los seres humanos sostenemos necesidades que son evidentes y no existe una magia dorada, todo es parte de una estrategia para llegar al objetivo; el diseño debería ser parte de la democracia y promover la equidad, la inclusión y la igualdad a través de un lenguaje simple y que comunique el concepto inicial de su diseñador. Para Starck el proceso de diseño de una cocina o un refrigerador es el mismo proceso que se utiliza para el diseño de una silla o una mesa, la única diferencia es el camino y el propósito que albergará, y cuán útil será para la persona.
Por lo tanto, la sociedad debería tener a su alcance cualquier producto industrial necesario para su rutina cotidiana, la gente debería sentirse satisfecho, pero, sobre todo, tener la seguridad que el producto ha sido diseñado para la gente común; sin embargo, nos enfrentamos a una realidad diferente y elitista; podemos observar que las cosas son diseñadas solo para un grupo de personas y la realidad es que en una sociedad existen diferentes culturas, ideas y perspectivas. Quizás empezar a formalizar el diseño democrático en nuestro lenguaje comunicativo y creativo para el proceso de diseño, sería una nueva manera de poder reflejar la generosidad y la fidelidad que tenemos hacia la vida y hacia la gente.
-Reseña escrita por:
-Canal de youtube Lo-Fi:
-Fuente de información:
Arq. Bryan Rodriguez Santos |
Co-Fundador, encargado de publicidad y Revisión de contenido para Lo-fi Magazines.
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